Turismo loco
Qué visitar en Vigo
Turismo loco
Archiconocida por su extravagante alcalde y su amor por las luces led para celebrar la festividad cristiana, Vigo ofrece muchas otras más cosas muy interesantes los 365 días del año; y si el año es bisiesto, los 366.
No solo la ciudad, también su entorno, con los poco conocidos furanchos, una experiencia rural que merece la pena: vino de la casa y raciones sencillas en unos jardines espectaculares.
El furancho o loureiro (de «laurel» en gallego) es un local situado en una pequeña bodega o en el bajo de una vivienda privada, en el que durante unos meses al año se realiza la venta de la producción propia de vino.
Viva Vigo!
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